Puente Genil (Córdoba)

La ciudad de Puente Genil, ubicada en la provincia de Córdoba y la comunidad autónoma de Andalucía, cuenta en la actualidad con casi 30.000 habitantes distribuidos a los largo de 170 km² de superficie.

Atravesada por el río Genil, que la bautizó, destaca por poseer una arquitectura industrial ochocentista que se extiende a lo largo de las dos orillas del río. Puente Genil no podría entenderse sin el río que le da el nombre y que, desde la antigüedad, ejercía una clara influencia en todo el territorio.

El origen fundamental del municipio se debe a la unión administrativa y demográfica entre la villa llamada Potón de Don Gonzalo, fundada en la época del rey Fernando III por Gonzalo Yáñez Donivar, y el pequeño núcleo de población llamado barrio de Miragenil, en la orilla opuesta del río. Esta unión tuvo lugar en el año 1834.

El lugar más visitado es la villa romana de Fuente Álamo, cuyos magníficos mosaicos se exhiben en el claustro del antiguo convento de San Francisco de la Victoria y en la propia ciudad. Además de los restos de la ocupación romana, cabe recordar la necrópolis visigoda de los Casterales y el castillo Anzur, testimonio de la ocupación musulmana.

El Museo Histórico Local contiene restos que datan del Paleolítico inferior hasta la Edad Media, demostrando el origen de la ocupación humana en este territorio.

En la arquitectura destacan la iglesia de Nuestra Señora de la Purificación, la iglesia de Jesús Nazareno y el templo del antiguo convento de San Francisco de la Asunción junto a la iglesia de San Francisco de la Victoria y una interesante arquitectura industrial ochocentista.

Aunque puede que sea más significativa por su simbolismo el puente sobre el río Genil, cuya primera construcción data de 1561. En la gastronomía no podemos olvidarnos de su famoso dulce de membrillo.

Puente Genil destaca por sus celebraciones de la Semana Santa, una de las manifestaciones más importantes y únicas de la religiosidad popular de Andalucía. La «Mananta» (contracción de las palabras Semana Santa) alcanza una dimensión única, una mezcla de símbolos en un desorden contradictorio. Ahí reside su misterio y su reclamo.

En total son 23 las procesiones que desfilan desde el Sábado de la Pasión hasta el Domingo de Pascua, acompañadas de las «guras», personajes bíblicos del Antiguo y Nuevo Testamento y símbolos de la teología cristiana. Su origen se remonta al año 1664.

El gran momento de la «Mananta» tiene lugar el Viernes Santo al amanecer, con la interpretación de la Diana en honor a Nuestro Padre Jesús Nazareno. El preludio de la Semana Santa es la Cuaresma, con los llamados «sábados romanos», un evento único que tiene lugar todos los sábados de la Cuaresma y el Domingo de Ramos, con la «ascensión de Jesús».

Otro aspecto importante de las celebraciones de Puente Genil es la denominada Semana Santa Chiquita, que se celebra en mayo con el protagonismo de los niños.